lunes, 23 de febrero de 2009

Cuento: 10 años.

Tendría 10 años. Caminaba con mi vieja, la tía Antonia y mi viejo. Me iban a despedir a la parada del 182, que estaba a una cuadra de mi casa. Un fin de semana con la tía significaba que por dos días sería un rey. Estaba muy contento y con la camiseta de River. Nos despedimos; chau mamá, chau hijo portate bien. Saludé a mí viejo y fui a la parada. Di unos pasos y me di vuelta, mí papá me miró y entró a la peluquería.
Un día después volvi a mí casa porque habían llamado urgente. Todos lloraban y yo no. Mi mamá, con sus ojos vidriosos, me dijo que se había ido “al cielo”. Lloré poco y vomite, con los años lloraría aún más. Y en ese momento estaba convencido de que el peluquero había sido el culpable.

1 comentario:

  1. Simplemente hermoso, no hace falta agregar nada.
    Te adoro!!!
    Geri

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