Miércoles de Fútbol I

A partir de hoy, todos los jueves el Big boludo realizará una síntesis de nulo interés histórico, periodístico y documental acerca de “El partido de los miércoles”.
Debido a la continuidad de estos enfrentamientos, es menester realizar una pieza literaria que permita que sus protagonistas no desfiguren su performance futbolística, no agiganten sus logros o menosprecien sus pequeños triunfos.
Personalmente señores, y tengo que decirlo, aclararlo para la posteridad, son en estos espacios en la mitad de semana en los que me siento Feliz. Si, ahí justo ahí: Jugando a la pelota.

Con lo Justo

Formaciones:
Equipo Vencedor: Jota y cuatro másJota; Fede; Pato; Pablo; y el pibe que tiene más huevo que la mayonesa.

Equipo Vencido: Las tres eses.
Simio, Seba, Sergio; uno nuevo que atajó; otro nuevo

Cuando el empate e incluso la victoria era irremediablemente una cuestión lógica para Las tres Eses, la voz salvadora desde la altura de la ventana del buffet dijo y determinó: - ¡Hora chicos! y Jota respiró porque el infierno había pasado y no tendría que revolcarse más para sacar todo lo que le tiraban al arco. Los cuatro más respiraron, habían ganado y punto. Uno arriba y nada más.
Simio con su cálido decir pregonaba para quién quiera escuchar: ¡Eso es de garcas! , ¡No podé ser tan garca!
A Jota y cuatro más le alcanzó con algunos contraataques para definir un partido en el que no tuvo el control de la pelota, se cerró en defensa y aprovechó las debilidades defensivas producto de que Las tres Eses iban, iban y no dejaban de ir con la pelota al piso, moviéndose por el ancho del campo pero sin la puntada final, sin el tipo que definiera de una vez por todas. Igualmente debemos ser justos y recalcar la tarea de Jota y del pibe que tiene más huevo que la mayonesa, en los cuales se apoyó la columna vertebral de un equipo que no encontró las respuestas esperadas en ofensiva de parte de la dupla Papa (Pablo y Pato). Alternaron los dos más malas que buenas y eso el equipo lo sintió.
Por su parte en Las Tres Eses si bien generó fútbol con su marca registrada de toque y movilidad fue una rosa sin espinas. Toque, rotación pero sin lastimar, sin decisión de llevarse puesto al rival. La hinchada ya pidió por Juancho, el habilidoso puntero que por problemas personales que el club no quiere dar a conocer, no concentró para éste partido.

Uno x Uno:

Jota y cuatro más

Jota: Mucho trabajo, sin responsabilidades en los goles y una pelota fundamental en la que salió a la mitad de la cancha a todo o nada, se llevo todo, por eso es la figura del encuentro. Pide selección.

Fede: Bien en ataque cuando pasó y demostró calidad en una hermosa jugada. Mal en el mano a mano.

Pato: “Una sombra ya pronto serás” sería el título para éste jugador que supo ser un buen exponente del jugador pendenciero y morfón. No encuentra su mejor nivel y la gente pide sangre fresca.

Pablo: A veces juega mal y eso es noticia. El crack estuvo errático con la pelota, pero se las arreglo para aportar su cuota de gol y sacrificio por el equipo. Exquisito gol de rabona con complicidad de la endeble defensa eseana.

El pibe que tiene más huevo que la mayonesa: Mel gibson en corazón valiente, rocky contra Apollo, Bruce en los supercampeones. Luchó, corrió y fue el gran muro para el toqueteo de las eses.

Las tres eses.

Uno nuevo que atajó: Buena producción, seguro en los shots de media distancia, salida rápida y sin errores.

Otro nuevo: De lo mejor. En defensa implacable, en ataque sus proyecciones fueron las que rompieron la rígida defensa con una regla tan vieja como el fútbol: Desborde y centro atrás.

Sergio: Quiso pero no pudo ser como habitualmente es el enlace entre la defensa y el ataque. Salvo un gol sobre la línea y puteó a sus compañeros. Dos goles al lado de la línea. No mucho más.
Seba: El beto no ganó en el pique corto, pegó una tremenda patada y pidió disculpas. Simulo una falta. Se lamentó. La hinchada también los hizo con su juego.

Simio: Se puso el equipo al hombro y transporto la pelota desde la defensa hasta la zona de conflicto. A veces se engolosinó pero no tantas como en otras ocasiones. Se lo nota mejor y más dispuesto al juego en equipo. Su tratamiento en la granja de rehabilitación está dando resultados.